El viaje se
acababa y la escala de Jakarta no era más que un paso de transición hacia casa.
Jakarta es una ciudad demasiado grande, demasiado superpoblada, demasiado
contaminada, demasiado musulmana…no nos llamaba.
Finalizaba
aquí un nuevo viaje a Indonesia que una vez más nos había sorprendido
agradablemente. Un viaje lleno de paisajes y culturas increíbles, pero como
todos los viajes necesitaría ser reposado en casa para poder asumirlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario