lunes, 12 de noviembre de 2012

11. Islas Kei (Molucas)



Finalmente hemos desistido de llegar a las isla Banda en barco desde Tual. Que un barco mercante salga para allí y nosotros nos enteremos es harto difícil y esperar a que llegue un barco PELNI es demasiado tiempo. Cambio de planes; volaremos hasta Ambon y desde allí al día siguiente tomaremos un barco a Bandaneira.
Como estamos un poco aburridos de tanta playa y además tenemos que comprar los billetes de avión alquilamos una moto para pasar el día por la isla. Llegamos a Langgur y hacemos una visita de cortesía a la recepcionista del hotel. Le hace mucha ilusión, demasiada a mi parecer y nos comenta que a la tarde quizás se pase por la playa pues su amigo la puede llevar. Después vamos hasta la oficina de LionAir y compramos el billete de avión, el precio es prácticamente el mismo que si fuéramos en segunda clase en un barco PELNI con la diferencia que en avión no tardaremos más de 40 minutos y en barco es un día. Queremos asegurarnos de tener un billete PELNI para ir desde Ambon a Bandaneira así que nos acercamos a las oficinas de la naviera que está en Tual. Nos cuesta encontrarla pero los lugareños nos ayudan de mil amores. Desgraciadamente el sistema no está informatizado y no podemos comprar el billete, lo tendremos que hacer en Ambon a nuestra llegada.
Volvemos hacia la playa pero paramos en el pueblo de Ngilngof donde están construyendo una gran iglesia. El calor es infernal así que nos acercamos hasta la playa del pueblo y nos damos un chapuzón. Con la marea alta la playa es inexistente pero no es suficiente para refrescarnos. Nos ponemos al sol para que la ropa interior se nos seque. 
Mientras esperamos unos lugareños se nos acercan, tienen que llevar unos depósitos de agua a un isla cercana, nos dicen cuál es pero no le entendemos, nos ofrecen acompañarles. Si hubiésemos estado sin moto probablemente lo hubiésemos hecho pero lo cierto es que no nos apetecía dejar todo el día la moto sin candar en el pueblo así que les dijimos que no. Una pena porque de seguro que hubiera sido una buena experiencia. De nuevo en la moto intentamos seguir hacia el pueblo de Debut por la costa pero el camino se volvía sendero y nosotros no éramos lo suficientemente habilidosos con la moto como para ir por allí. Si deseábamos seguir la excursión debíamos regresar a Langgur y allí coger otra carretera a Debut. Pero lo cierto es que no nos apetecía hacer tantos kilómetros en moto y menos con el intenso calor que hacía así que volvimos a Ohililir. Allí a la sombra y frente al puerto de pescadores pasamos el resto de la tarde leyendo y observando el trabajo de los pescadores.
Al atardecer volvimos a nuestra cabaña y nos tumbamos para disfrutar de la bajada de temperatura y del anochecer. A lo lejos vemos una figura femenina que nos saluda, no la reconocemos y pensamos que no se dirige a nosotros. Pero tanta es su insistencia que al final nos levantamos y nos acercamos. Se trata de la recepcionista del hotel. ¡Nos habíamos olvidado por completo de que iba a venir! Estuvimos hablando con ella lo que quedaba de tarde. Nos constó que era cristiana, que nació en Ambon y que fue a Europa, en Holanda antigua metrópoli de esta zona, cuando estallaron los disturbios religiosos en 1999. Después volvió y hace unos meses decidió venir a Langur donde encontró trabajo en el hotel Dragon. Echaba de menos a su familia así que su idea era regresar a Ambon en breve. Nos habla de la vida en las Molucas, de los conflictos religiosos, de las oportunidades de trabajo, de los estudios….Ya casi con la noche encima viene su amigo a buscarla y se marcha.

No hay comentarios:

Publicar un comentario